Tú puedes ser lo que quieras ser, ¿estás dispuesto a intentarlo?

Tras el estreno del tráiler de Barbie la película, resurgió el slogan de “tú puedes ser lo que quieras ser”, una tendencia que incluyó crear un póster personalizado con colores, fotografías y una frase indicando qué tipo de Barbie o Ken eres. Con esto se nos permitió a todas las generaciones soñar en ser por un momento aquello que siempre quisimos pero que quizás al final no resultó como esperábamos.

Cuando somos niños es muy fácil imaginar y jugar a desempeñar diferentes profesiones, incluso se nos cuestiona con la típica pregunta ¿qué quieres ser cuando seas adulto? En esa etapa quizás es fácil responder y cambiar de profesión cada vez que nos preguntan, pero una vez que nos enfrentamos a elegir una carrera (con tan sólo 18 años de edad) o encontrar nuestra verdadera vocación se convierte en una decisión complicada y confusa que impactará nuestro futuro.

Vivimos en una sociedad donde la mayoría de las veces los padres influyen en la elección de una carrera, ya sea porque todas las generaciones se han dedicado a una misma profesión, porque la familia tiene un negocio y hay que continuar con el legado o simplemente porque consideran que ciertas carreras son mejor remuneradas y aseguran el futuro de sus hijos. Lo anterior impide en muchas ocasiones elegir una profesión que nos llene, nos apasione y  en la que disfrutemos trabajar la mayor parte de nuestra vida adulta.

Como especialistas en atracción y selección de personal nos encontramos en el mercado perfiles con estudios no relacionados las actividades que ejercen, carreras truncas e incluso candidatos que después de varios años enfocándose en un área profesional deciden retomar su pasión, comenzar de cero y buscan dedicarse a aquello que realmente los hace felices.

La mayor parte de nuestro tiempo la pasamos trabajando, lo más lógico es que los disfrutemos, si no es tú caso, entonces estás en una profesión equivocada. Te compartimos 5 señales para identificar si estás en la profesión equivocada y algunas preguntas que debes hacerte para descubrir si estás en el camino profesional correcto.

1. Tú motivación es sólo el sueldo que percibes. Trabajas pensando en resolver tus necesidades económicas. ¿Si tuvieras tus finanzas resueltas seguirías dedicándote a hacer lo que haces ahora?
2. No te ves haciendo lo mismo que haces durante muchos años más. ¿Cuándo elegiste la carrera estabas 100% segura de a qué querías dedicarte el resto de tú vida?
3. Te esfuerzas demasiado. Cuando haces algo que no te gusta, todo se siente artificial y te obligas a hacer cosas. ¿Sientes que te cansas más de lo necesario y no logras nada significativo?
4. Te sientes atraído por la idea de cambiar radicalmente tú vida. Cuando menos te das cuenta te descubres imaginando una vida diferente a la que tienes, viajando por el mundo, intentado hacer algo que siempre has querido o dedicándote de lleno a un hobbie. ¿Qué tan a menudo fantaseas con una vida diferente?
5. Estás cansado y decaído todo el tiempo. Si al terminar tú día laboral sientes que no lograste nada importante, que desperdiciaste tu tiempo y que no tienes energía para realizar otras actividades. ¿Sabes en qué estás invirtiendo tú tiempo laboral, qué estás obteniendo?

Sí respondiste “sí” a más de 3 preguntas, es momento de replantearte un cambio de actividad profesional y sacar a la luz tus verdaderas capacidades, talentos, habilidades, virtudes y fortalezas que tienes dentro. Cambiar de profesión es una oportunidad para darte cuentan del gran potencial que tienes y ponerlo en acción, reflexiona si ya has dado todo lo que puedes dar a este mundo.

Sabemos que hacer un cambio radical en nuestras vidas da miedo, sobre todo cuando nuestra situación económica depende de ello y resulta más atractivo quedarnos como estamos. Seguir haciendo lo mismo aunque no nos guste no tiene nada de malo pero puedes perderte a ti mismo lentamente. La decisión es tuya, para continuar como estás requiere mucha fuerza y hacer un cambio aún más, además de coraje y determinación.

Si estás listo para salir de tú zona de confort y estar dispuesto a hacer lo que nunca has hecho, te apoyamos como algunos consejos que pueden serte útiles:

• Analiza tus hobbies, estos reflejan lo que despierta tú curiosidad e interés. Esto es un indicador de lo que realmente te apasiona, si te dan ganas de seguir aprendiendo y desarrollarlos más es buen camino para descubrir lo que te hace feliz e identificar a qué dedicarte.
• Identifica tus fortalezas, haz una lista de todos los logros que has tenido en tú vida, desde los más pequeños hasta aquellos que fueron reconocidos. La idea es tener una muestra tangible de quién eres, motivarte y creer en ti mismo.
• No realices cambies radicales o repentinos, esto puede generar estrés, ansiedad, incertidumbre y quizás afectarte económicamente, totalmente contrario a lo que buscas. Hacer un cambio requiere paciencia, empezar de lo menos a lo más.
• No renuncies a tú actual empleo de forma apresurada, no pierdas la fuente de ingresos por un arrebato. Aprovecha los tiempos libres entre semana o fines de semana para planear en tú nueva actividad o emprendimiento, dale forma, revisa pros y contras. Una vez que tengas todo bajo control y estés segura de dar el gran paso, renuncia.
• Sé constante, nadie obtiene resultados de la noche a la mañana, un cambio de profesión requiere tomar acción y realizar las actividades necesarias que te lleven al objetivo final. No te desanimes ante el primer reto o dificultad, esto te ayudará a ganar confianza en ti mismo.

• Mantén tú actual trabajo sin pendientes, si ya estás realizando actividades que no te llenan, te aburren y te causan estrés, lo mejor es concluir con actividades rezagadas que te fatigan mentalmente. Ponte el reto de borrar de tú lista de pendientes aquello que has postergado, esto te dará claridad y tiempo para pensar en tú cambio profesional.
•  Consigue un empleo de transición, en medida de lo posible busca un empleo de medio tiempo, fines de semana o voluntariado (¡ojo! sin descuidar tú actual empleo), no tiene que tener el gran sueldo o un gran puesto. Más bien busca tener una nueva experiencia enfocada a algo que siempre hayas querido hacer, esto será un catalizador para encontrar tú pasión y actividad ideal.
• Toma cursos relacionados a tú nueva actividad, si ya descubriste lo que te gusta pero te faltan conocimientos o práctica, inscríbete a un cursos que te permitan reforzar tus conocimientos y también conocer a profesionistas que ya estén en el ramo de tú interés para crear conexión e indagar sobre sus experiencias.

Recuerda que sólo tenemos una vida y no durará para siempre, no dejes que pasen los años haciendo algo que no te gusta y que por el contrario trae estrés o fatiga a tus días. Aprovecha tus talentos para hacer lo que disfrutas, mejora tú estilo de vida y siéntete feliz y satisfecho.

Si después de analizarlo, el cambio no es para ti, entonces aprende a amar lo que haces, busca cómo disfrutar de tú profesión y no dejes que te amargue. Pasas la mayor parte de tú vida trabajando, si no es lo que esperabas busca el enfoque correcto para a pesar de todo ser feliz.

Y sólo para divertirnos y jugar un rato, te dejamos el link para hacer tú poster de Barbie o Ken y ser por un momento aquello que siempre quisiste ser: Barbie Generador de selfies (barbieselfie.ai)

Compártenos tu póster y ¿por qué no?, también colócalo en tú feed de LinkedIn.

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